Polémica Educativa: Boal

A lo largo de estos días, la polémica del Bachillerato en Boal ha sacudido al Occidente. Vaya por delante que entendemos la pretensión de la Consejería de recortar gastos allá dónde a su entender son excesivos, pero en este caso, no podemos estar de acuerdo. En primer lugar, porque la educación es la base sobre la que se sustenta la sociedad. Y no nos engañemos, teniendo que desplazarse a otra parte, muchos optarían por la salida fácil: dejar de estudiar. Y en segundo lugar, porque somos conscientes de que es difícil mantener ciertos servicios en poblaciones no muy grandes como es el caso, incluso en otras ligeramente más grandes como es Cangas, pero ello no debe ser impedimento para que luchemos por conseguirlos y mantenerlos.

De igual forma, no podemos estar de acuerdo con la hipocresía del Sr. Emilio Rodriguez -diputado por el Occidente y presidente del PP de Cangas- que hace 12 años defendió la eliminación del bachiller en Boal como Director Provincial de Educación y resulta que ahora corre a hacerse la foto con los vecinos y a ofrecerles su apoyo. Ya está bien de hacer política basura, tomando a los ciudadanos por idiotas, ofreciéndoles cuando eres tu el que necesita y quitándoles cuando eres tu el que da. Quizá piense como la mayoría de nuestros vecinos, que ven como una opción más viable de derechas a IDEAS que al PP, y entonces, puede estar seguro de prometer sin miedo a tener que cumplir.

Como profesor y director del Instituto que fue, debería ser consciente de que la educación no es una partida de ajedrez en la que usar a los ciudadanos como piezas para ganar votos. Porque con la educación no se debe jugar. Porque nos merecemos un sistema educativo sin bandazos, construido sobre unas lineas coherentes y sensatas, que de a nuestros jóvenes la mejor formación posible para poder competir en un mercado globalizado y enormemente difícil. Porque no se puede decir blanco o negro dependiendo de los votos que se puedan obtener. Si cree que en el 98 estaba equivocado, que lo diga. Y sino, que aclare si por unos votos es capaz de cambiar de chaqueta las veces que haga falta.

Teniendo en cuenta que la experiencia del Sr. Rodriguez es indudable, no podemos evitar pensar en hechos como estos cuando se nos acusa a los jóvenes de no tenerla. ¿Experiencia en que? ¿En hacerlo mal? ¿En arrimarse al sol que más calienta? Pues no, va a ser que no la tenemos, pero es que tampoco la queremos ni la necesitamos. Porque ese tipo de política no va con nosotros, porque aspiramos a hacer las cosas mejor, porque deseamos una política basada en la honradez, la transparencia y la sinceridad, porque no, de verdad que no, no todos somos iguales.

Enhorabuena a los ciudadanos de Boal por mantener el Bachillerato. Y gracias al Sr. Emilio Rodriguez por dejarnos ver la cara tras la máscara.